Este verano se ha estrenado “Stuber”, una comedia de acción con la típica pareja improbable y con calificación R. La película ha sido un rotundo fracaso de taquilla y la crítica no ha sido muy amable con ella, que digamos. Una vez vista, se entiende.
La dirección sólo luce en la introducción de la cinta (bastante bien filmada, y donde se pone toda la carne en el asador). Luego se dispersa y no vuelve a haber ninguna escena para el recuerdo (ni siquiera poniéndole canciones de fondo para que el momento sea más “cool” que es lo que suelen utilizar la mayoría de films).
La película usa el recurso de la violencia sin tapujos para intentar destacar, en plan “eh, somos unos traviesos y revolucionarios”. Me importa un comino si hay sangre a raudales y un gran recuento de bajas. Si la acción no funciona y la historia tampoco, no me vale que sea bruta y desmadrada (o eso es lo que pretende).
En cuanto al guion, es bastante flojo, predecible y carente de garra, por no decir que apenas hace gracia (las mejores líneas de dialogo son para el alivio cómico de la película, es decir, el contrapunto de Bautista) y no hay mucho que rescatar, la verdad.
La duración de la película es muy corta, pero eso no siempre es bueno, ya que no da tiempo a que nazca una verdadera amistad entre los protagonistas y, aunque los intérpretes tienen algo de química, se quedan un poco en tierra de nadie.
Dave Bautista cumple de forma correcta como héroe de acción, pero ya se empieza a notar demasiado que su gran papel es el de “Guardianes de la Galaxia” y que jamás estará a la altura de aquello. Nació para ese papel y el resto son personajes sin la misma fuerza de aquel.
En cuanto al cómico Kumail Nanjiani, qué se puede decir. Es un actor que me tiene desubicado, ya que a veces tiene momentos inspirados, pero actúa la mitad del tiempo como con sueño, debido a su falta de expresividad cuando le toca interpretar una escena seria, y esto es algo que le sucede demasiado. No obstante, al igual que su compañero, cumple en su papel de persona normal que debe afrontar una situación límite (alerta de cliché).
Ambos tienen una química decente (tampoco nos emocionemos), pero la película les impide ir más allá, ya que está todo muy atropellado (nunca mejor dicho) y parece que quieran acabar cuanto antes, haciendo que sea imposible conectar con los personajes.
Respecto al resto del reparto, tenemos a unos muy desaprovechados Karen Gillam (que supongo que ha hecho el favor por su amistad con Bautista) o Iko Uwais (que al menos parece que se lo pasa en grande como villano), y que apenas salen unos minutos. Lo de Mira Sorvino mejor lo dejamos a un lado, por el bien de todos.
En conclusión, estamos ante una comedia de acción que no hace gracia (quizás algún momento, pero poco más) y que no impacta, siendo una más, y resultando un producto prescindible y olvidable. Lástima, porque con un poco más de esfuerzo podría haber quedado algo mucho más entretenido y divertido.
